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Poco hay para agregar a la polémica de si el "graffiti" es arte o vandalismo.
Creo que una mirada por estas fotos, tomadas todas ellas en muros de la ciudad de Montevideo, nos acercan al concepto "arte" mas que a al concepto de "destrucción que no respeta nada" (definición de la Real Academia del término Vandalismo)
En todo caso, una vez más el arte en sus diversas expresiones ha salido a la calle para estar con la gente. Esculturas efímeras en las playas hechas con arena y dignas de Miguel Angel; pintadas 3D en tiza; poetas vendiendo coplas; músicos en las estaciones de metro; mimos; estatuas vivientes; clowns y una infinita gama de artistas difíciles de censar.
Eso sí, hoy mismo, a la hora de publicar estas fotos nos enteramos de un emprendimiento que hay en la triple frontera (foz de iguazú) de hacer el mayor graffiti de la historia para entrar al libro guinness.
Sí, como lo oyen.
Hubo un tiempo en que salir a pintar las paredes era un acto clandestino, que se realizaba con nocturnidad y alevosía, siempre avizor de la llegada de la patrulla policial, con la capucha puesta y el bote de spray en ristre. Ahora, el llamado “ graffiti más grande del mundo ”, es en realidad un mural que incumple todos los preceptos señalados arriba: se está haciendo a plena luz del día, con un equipo de pintores con brocha y rodillo, lo va a inaugurar el presidente Lula y, para rematar, aparecerá en el Guinness de los Records, gracias a los 3. 500 metros cuadrados que ocupa. (Es honesto decir que se han puesto de acuerdo varios genios del graffiti para que la temática sea "los derechos humanos"; ole por ellos!!)
Solo nos queda invitar a una reflexión: "¿Hasta donde podemos ceder nuestro libre albedrío en pos de un lavado de cara para una actividad que desde siempre ha cumplido un rol reivindicativo, social y cultural? ;o si lo prefieren dicho de otra forma..., ¿mantendrá sus cimientos el movimiento de graffiteros cuando en vez de un muro se estén disputando subenciones y financiaciones? Creo recordar que ya paso con formas de vida como el surf (ahora deporte de elite) y tantos otros movimientos.
Ojalá solo sea una equivocación mía más. Eso espero.
Gonzalo Fernández