Y una vez más, Teatro Rayuela montó al carro de los cómicos de la legua y puso rumbo hacia Almería. Más concretamente hacia “El Ejido”. Con la misma ilusión de siempre. Nuevas gentes, nuevas costumbres, y sobre todo nuevas aventuras y desafíos.
Los ejidenses se despertaron con sus calles invadidas por faunos, duendes y otros seres fantásticos ávidos de jugar y divertirse. Y entre todos lo conseguimos. No faltaron marionetas queriéndose liberar de sus manipuladores, o faunos subastados como atracciones de circo, o duendes recién llegados del bosque para rescatar los sueños de quienes los han ido olvidando. Todo encajó a la perfección. Pero no es mérito solo de Rayuela. Es mérito de cada visitante que jugó con nosotros; de cada niño que se acercó en los descansos a preguntar por los personajes; de los compañeros artesanos que fueron regalándonos sus sonrisas cómplices a nuestro paso; y de los encargados, organizadores y autoridades que dieron un voto de confianza
a nuestro trabajo.
a nuestro trabajo. A todos ellos queremos darles las gracias y con todos ellos queremos compartir esta mágica sensación de alegría que aún resuena en nuestros oídos con el aplauso de la despedida.
Esperamos reencontrarnos pronto. Hasta siempre.
Cia. Internacional Teatro Rayuela
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